Naucalpan bajo espuma: la misteriosa capa blanca tras el desbordamiento de la Presa Los Cuartos

La mañana del domingo 22 de junio de 2025, los habitantes de Naucalpan, Estado de México, despertaron ante una imagen tan insólita como alarmante: calles, avenidas y viviendas cubiertas por una densa espuma blanca. Lo que muchos confundieron inicialmente con granizo resultó ser un fenómeno mucho más inquietante, resultado directo del desbordamiento del Río Hondo y la Presa Los Cuartos, tras las intensas lluvias asociadas al huracán Erick. Pero, ¿qué es realmente esta espuma y por qué apareció en tal magnitud?

El origen de la espuma: ¿una mezcla tóxica?

La escena, más propia de una película de ciencia ficción que de la vida cotidiana, tiene una explicación científica y ambiental contundente. Según autoridades y especialistas, la espuma es consecuencia de la contaminación acumulada durante años en el sistema pluvial y el cauce del río. Las lluvias torrenciales provocaron el colapso del sistema de drenaje y arrastraron una mezcla de residuos orgánicos, detergentes, grasas, químicos industriales y aguas negras. Esta combinación, al ser agitada con la fuerza del agua desbordada, generó reacciones químicas que dieron lugar a la formación de la espuma blanca que cubrió gran parte de Naucalpan.

Expertos en contaminación hídrica explican que la presencia de espuma en cuerpos de agua urbanos suele estar asociada a la acumulación de detergentes y aguas residuales. Si bien la espuma puede generarse por causas naturales, en este caso es un claro indicador de un grave problema ambiental y sanitario.

El papel de la basura y el colapso del drenaje

El fenómeno no fue casual. La acumulación de basura en la presa Los Cuartos fue determinante. Según la Comisión Nacional del Agua (Conagua), un tapón de aproximadamente 700 toneladas de desperdicios se formó en el dique. Cuando este tapón cedió abruptamente por la presión del agua, el caudal del río aumentó de forma crítica, arrastrando consigo toda clase de residuos acumulados en el sistema de drenaje.

La precipitación inusual —50 milímetros en menos de 24 horas—, sumada a la incapacidad del drenaje para evacuar el agua, provocó que el río se desbordara y que la espuma se expandiera rápidamente por colonias como San Rafael Chamapa y Nueva San Rafael. En algunas zonas, el nivel del agua superó los 50 centímetros, mientras que la espuma llegó a alcanzar alturas de hasta metro y medio en las calles.

Impacto en la comunidad: casas, autos y salud en riesgo

El saldo inmediato fue devastador. Al menos 50 viviendas de las colonias San Rafael Chamapa y Nueva San Rafael resultaron afectadas, seis de ellas con daños mayores. Decenas de autos particulares quedaron cubiertos por la espuma y el agua contaminada. Vecinos tuvieron que resguardarse en azoteas y pisos superiores para evitar el contacto con la mezcla tóxica que inundó sus hogares.

La espuma, lejos de ser inofensiva, representa un riesgo significativo para la salud. Autoridades sanitarias advirtieron que el contacto directo puede provocar irritación en la piel, enrojecimiento, picazón y dermatitis, debido a los químicos y residuos tóxicos que contiene. Por ello, se recomendó a la población evitar cualquier exposición a la espuma y a las aguas residuales, así como seguir las indicaciones de las autoridades durante las labores de limpieza y desinfección.

Respuesta oficial y análisis de la espuma

Ante la emergencia, el gobierno municipal de Naucalpan, en coordinación con la Comisión Nacional del Agua, Protección Civil, Guardia Nacional y el Organismo Operador de Agua de Naucalpan (OAPAS), desplegó un operativo para atender a los afectados y comenzar las tareas de limpieza. Equipos especializados en laboratorio están analizando la composición exacta de la espuma para descartar riesgos adicionales y determinar el grado de toxicidad de los residuos presentes.

El alcalde Isaac Montoya Márquez informó que, desde el domingo, personal de Conagua y del gobierno estatal se encuentra en la zona afectada, impulsando labores sanitarias para contrarrestar los efectos de la espuma y prevenir brotes de enfermedades derivadas del contacto con aguas negras.

¿Por qué se generó la espuma? Explicación técnica

La explicación técnica proporcionada por especialistas y autoridades es clara: el río que se desbordó transporta principalmente aguas negras. La velocidad y fuerza con la que descendió el caudal, mezclada con los residuos orgánicos, detergentes y químicos industriales, provocó una reacción química que generó la espuma. Este fenómeno, aunque puede tener causas naturales en cuerpos de agua limpios, en zonas urbanas como Naucalpan es casi siempre consecuencia de la contaminación y la falta de tratamiento adecuado de las aguas residuales.

Un síntoma de un problema mayor

La aparición de la espuma en Naucalpan no es un hecho aislado, sino el síntoma visible de un problema estructural de fondo: la falta de infraestructura adecuada para el tratamiento de aguas residuales y la gestión de residuos sólidos en zonas urbanas densamente pobladas. La acumulación de basura en presas y ríos, combinada con la descarga constante de contaminantes industriales y domésticos, convierte a los cuerpos de agua en auténticos focos de riesgo ambiental y sanitario.

El evento también pone en evidencia la vulnerabilidad de las ciudades ante fenómenos meteorológicos extremos, cada vez más frecuentes por el cambio climático. Las lluvias intensas superan la capacidad de los sistemas de drenaje y arrastran consigo todos los contaminantes acumulados, generando emergencias como la vivida este fin de semana en Naucalpan.

¿Qué sigue para Naucalpan y la zona afectada?

En las próximas semanas, las autoridades continuarán con las labores de limpieza, desinfección y apoyo a las familias afectadas. La Comisión Nacional del Agua revisará las denuncias sobre el manejo de la presa Los Cuartos y la posible responsabilidad por el retiro del tapón de basura que precipitó el desbordamiento7.

Mientras tanto, expertos y activistas ambientales insisten en la necesidad de implementar políticas públicas más estrictas para el manejo de residuos, el tratamiento de aguas residuales y la restauración de los cuerpos de agua urbanos. La espuma que cubrió Naucalpan es, en última instancia, un recordatorio de los costos de la contaminación y la urgencia de actuar antes de que estos fenómenos se repitan con mayor frecuencia y gravedad.

Una llamada de atención

La misteriosa espuma blanca que inundó Naucalpan tras el desbordamiento de la Presa Los Cuartos es mucho más que una curiosidad meteorológica. Es el resultado visible de años de descuido ambiental, de sistemas de drenaje colapsados y de la acumulación de residuos en ríos y presas. Más allá del impacto inmediato en la salud y el patrimonio de cientos de familias, el fenómeno deja una lección clara: la gestión del agua y los residuos es un asunto de seguridad pública y ambiental que no puede seguir postergándose.

La emergencia en Naucalpan debe ser un punto de inflexión para autoridades y sociedad. Solo con acciones coordinadas, inversión en infraestructura y una cultura de responsabilidad ambiental será posible evitar que escenas como la vivida este fin de semana se repitan en el futuro. Naucalpan, cubierto de espuma, es hoy el espejo de un reto que enfrenta toda la zona metropolitana del Valle de México.